El público de las batallas se sale del camino
La evolución del movimiento fan y su repercusión para los MCs
Apuntaba Kase O en una entrevista a versosperfectos (la cual recomiendo al cien por cien) que la fama es una arma de doble filo, porque es como una droga. Y aunque el mayor de los Ibarra apuntaba con esa afirmación en dirección a los nuevos MC’s del panorama, esto se puede aplicar al público, que ve la adicción no en la propia fama, sino en el famoso. La era de la instantaneidad a la que nos ha llevado la revolución tecnológica ha llegado al rap, y es por ello por lo que debemos ser conscientes de sus consecuencias.
Desde la reaparición en 2013 de la Red Bull Batalla de los Gallos las competiciones entre freestylers encima de un escenario o en la calle han ganado una gran popularidad. Parecía imposible de imaginar en aquellos tiempos que unos chavales entre catorce y veinte años pudieran llenar una sala, y mucho menos un parque. Hoy, en 2017, el Quinto Escalón es capaz de hacer un evento con 11000 personas, teniendo en cuenta que no usan ni microfono ni altavoz. Increíble. Pero como ya advirtió Underdann: “Esto está lleno de fanes”.
El público es una parte esencial de las batallas. Los ojos expectantes deciden en gran parte el porvenir del evento, ya que el freestyle, más allá de técnica, es el momento, el punto en el que se encuentre el rapero. Por ejemplo, si Arkano hubiera salido al escenario de Chile como al de Alicante, adiós final. Pero la motivación, el instante y el presente, hacen que todo cambie. Y en eso el público puede desempeñar un papel fundamental, como ya lo jugó en Perú, en la regional de Gold Battle de Madrid o en el enfrentamiento entre españoles y mexicanos de la BDM.
Y bien, ¿a qué viene todo esto? El discurso está precedido por los eventos ya comentados, pero sobretodo con lo que está pasando en el Quinto Escalón, que bajo mi punto de vista es la cara visible del cambio en las batallas. Los chicos de Buenos Aires empezaron hace ya tiempo con un público no tan grande como el actual, lógicamente, y han ido creciendo a medida que sus freestylers y público crecían, pero ha sido todo muy rápido. ¿Y qué pasa cuando se crece rápido? Que se hace mal. Lo que antes era respeto (MC’s como Duki, que hasta celebran las rimas del rival) y ganas de rapear ahora se han convertido en simplemente, una competición.
Groove marcó demasiado. La final nacional tuvo un público desastroso, lo cual es sorprendente en Argentina, la Big Bang por ejemplo contó con unos espectadores ansiosos de ver rap. El Quinto olvidó todo eso. ¿Un ejemplo? Klan vs. Wos. El de cuartos de la octava fecha, donde Wos hace uno de los minutos que más me han impresionado de un freestyler, pero que el ruido y el apoyo hacia Lucas le permiten avanzar de ronda. Evidentemente en competiciones de plaza, de calle, los tongos o equivocaciones son de una gravedad menor que en Red Bull, pero el problema no fue la decisión del jurado, fue la del público, que se declinó por apoyar a Klan como si no hubiera un mañana.
El problema pues no es de los raperos, al fin y al cabo son adolescentes que de repente se han encontrado con la fama. Debemos fijarnos en el público. Muchos los llaman topos, fanes, niños rata. Una serie de adjetivos descalificativos, lo cual es comprensible, pero no debería ser así. Ellos son la cantera. Los que hoy gritan ante un punch básico de Klan, si se les educa y no se les echa, comprenderán mañana que vale mil veces más un freestyle que una batalla a sangre, un tema que una improvisación, una maqueta que un videoclip. Y eso se aplica a todo el rap.
Las batallas solo eran una excusa para esta pequeña reflexión. Si impedimos que los nuevos entren a la cultura por no ser “reales” (Término que se ha desvinculado totalmente de la realidad con su excesivo uso), nunca llegaran a serlo. Si no se les explica de donde nace nuestra cultura, que significa y los valores que nos aporta, nunca sabrán ni entenderán nada. Así que en lugar de echar a los nuevos, mejor démosle la bienvenida. Los falsos acabarán huyendo. El rap permanecerá.
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Texto por: Arnau Carrió
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Comentarios
Siendo "objetivos", el tiempo de ese entrenamiento que pones entre paréntesis, en los casos de los freestylers tan admirados por ese público, que dices que se sale del camino, suele ser bastante mayor que el de cualquier maquetero aficionado. De manera que sí me parece importantísimo relativizar. No por haber escrito una maqueta voy a pensar que he dedicado más tiempo al rap que todo freestyler que no ha escrito practicamente nunca una letra.
A parte de que entre ese público se encuentran muchos chavales que nunca estuvieron en ningún camino y, si se han interesado por las batallas, eso, como mucho, les acercará al camino que (a ti y a mí) nos parece más adecuado.
No quiero desestimar tu artículo porque me parece una muy buena, aunque un poco precipitada, observación. Comparto totalmente la opinión de que que el rap es mucho más completo acompañado del movimiento hip hop. Pero no deja de ser mi opinión. E igual que nadie me dijo nunca qué tenía que escuchar ni cómo, no creo qe seamos nadie para andar adoctrinando a nadie.
Si el graffiti en lienzo se pusiera de moda entre los pintores hiper realistas contemporáneos, estaría encantado de que les molara la misma movida que a mí a su manera y en ningún caso pretendería que compartiesen el gusto por el resto de disciplinas de la cultura hip hop. Pero lo último que pensaría es que se estan distanciando de ésta, sino todo lo contrario.
Es como si dejas de llevar tu gorra porque tu vecina la pija se ha comprado una igual. Déjala a la chavala que lleve lo que quiera.
#5 Como comentaba previamente, no me refiero al valor sentimental como tal, que se lo da quien lo escucha, sino al objetivo. El trabajo dedicado en escribir una letra no es el mismo que en hacer un free, básicamente porque las letras salen tras pensar cada palabra y en la improvisación el trabajo es en el momento (aunque es cierto que se necesita un entrenamiento).
Y hablando de preferencias, imagino que hay gente que pensará que la música de Pitbull está por encima de la de Pink Floyd, Violadores del Verso o The Beatles. En preferencias todo vale, pero si relativizamos con todo creo que caemos en el error de pensar que alguien que no tiene conocimiento de un género, como los nuevos fans a los que me refiero en el artículo, puede opinar con los mismos argumentos y profundidad que alguien que ha dedicado mucho tiempo de su vida a trabajar esa materia, en este caso el rap.
"vale mil veces más un freestyle que una batalla a sangre, un tema que una improvisación, una maqueta que un videoclip. Y eso se aplica a todo el rap"
Yo coincido contigo, pero hay gente que prefiere una batalla a una canción, un video a una maqueta, etc.. y eso es igual de respetable que tus preferencias, Arnau.
Cada uno tiene las suyas y no creo que valgan mis veces mas, como dices tú, que las de otra persona.
#2 Tienes toda la razón en lo de Ibarra, ¡pido perdón!
Aunque no estoy de acuerdo con que el hip hop fuera competición en sus inicios (he estado buscando y no he encontrado nada al respecto, pero creo que entiendo a lo que te refieres), o al menos no en el sentido al que me refería, de gente animando a raperos como si fueran equipos de futbol.
Supongo que no me he explicado bien, mea culpa. No digo que una cosa sea menos que la otra. Digo que el freestyle para muchos de los que entran ahora no representa tanto los valores de hip hop como lo puede hacer un tema, donde se puede ver mucho más facilmente el trabajo de un MC. Coincido contigo en que hay frees mucho mejores que maquetas enteras (por poner un ejemplo, un free de Azcino es mucho mejor que un tema suyo), pero es más fácil de comprender el trabajo detrás de un disco que de una improvisación, aunque improvisar requiere muchas horas de entrenamiento.
Por otro lado no estoy de acuerdo con lo de educar. Creo que aquellos que llevamos más años deberíamos mostrarles que es el rap, así como nosotros nos dejamos influenciar y para así decirlo "educar" por los que nos enseñaron la cultura. No es una cuestión de adoctrinar, sino de abrir la ventana de posibilidades a los nuevos. Al fin y al cabo, si somos más mucho mejor.
"El mayor de los Ibarra" no es Kase O.
La batalla es la forma mas directa y objetiva que se ha visto en el mundo del rap de convertir el freestyle en KOMPETICION, que es una de las caracteristicas que definen el movimiento y la cultuta HIP HOP desde sus inicios.
Aqui nadie es nadie para educar a nadie, Arnau.
Si las batallas, que son una vertiente del freestyle, que es una vertiente del rap, que es una vertiente del Hip Hop; estan en auge, y a ti te parece que el rap representa mejor el Hip Hop en forma de tema que de batalla, es el momento de que dejes de quejarte y empieces y animes a la gente a escribir temas con las mismas ganas, la misma ilusion y, si lo tienes, el mismo talento que demuestran estos chavales que, como tu dices, llenan una plaza con 11000 personas sin micro ni altavoz.
Yo soy MC, pero no freestyler. Lo cual no me impide saber que muchos de los mejores freestyles de la historia son batallas, que existen improvisaciones mejores que muchos temas y algunos videoclips que valen mil veces mas que una maqueta. Incluso se me ocurre mas de una batalla que se merienda maquetas y maquetas enteras.
#8 el 01/03/2017 a las 13:52:
#7 Evidentemente cuando hablaba del trabajo de los MC's, no comparaba un maquetero aficionado a alguien que se dedica profesionalmente a improvisar o que gana dinero de ello.
En cuanto al camino, está claro que los "nuevos" no hacen sino sumarse a él, pero se puede ver fácilmente que lo están cambiando. No digo que sea bueno ni malo precisamente, es más mi intención era decir que es bueno y que en lugar de decirles que se vayan debemos intentar que se queden, que cuantos más seamos mejor. Pero es como cuando llegas a un nuevo país: al principio desconoces su tradición y su cultura, y aunque es super importante que tu no dejes de ser quien eres y no pierdas tu "background", lo mejor es empaparse del lugar al que llegas.
Por lo que respecta al graffiti realista contemporáneo, comprendo lo que dices, pero personalmente creo que sería más interesante si estos en lugar de hacer lo que quieren cogiendo algo que ellos no han creado, respetaran su origen. Al fin y al cabo es lo que digo: La mayoría de acciones que hacemos y vemos tienen un significado, sino todas, y debemos respetarlo. El rap tiene unos orígenes, la cultura hip hop se identifica con unos valores que el público mayoritario desconoce y es lo que nos hace verdaderamente importantes. Si eso se pierde por dejar que cualquiera diga y haga lo que quiera con las herramientas que da el rap, el público habrá roto el camino. ¡Espero que la vecina pija no se compre mi gorra!