Coleccionistas de destinos - La sexta oscuridad

[Elosue]
De pequeños jugaban con tierra ahora juegan con fuego,
Antes no sabían jugar ahora ponen las reglas del juego
Y mi primera regla es romper normas del sistema.
No temas a tu sombra que tiembla por el miedo.
Hombre ciego de poder cree poder salvar el mundo
Y su rotundo cambio es destruirlo en segundos.
Hay más sinceridad en las gracias del vagabundo
Que en la de un político comprometido con mi arte profundo.
Ya no confundo a las personas
Son las bombas humanas con ganas de explotar tus odas.
No dispongas de las modas todas van y vienen
Mientras otro se mantiene a solas siendo leal aunque no suene.
Raptan rápido al parásito los ratis
Al día siguiente lo sueltan por que era poli su papi,
Nena de mami ahorrando para comprarse un cuaderno y un lápiz
Por que en su escuela se dice que hoy en día nada es gratis.
Ojala fuera fácil
Asignar las ganas de fuerte ante una muerte frágil.
El coraje es inútil cuanto más grande más débil
Ya no hay que servir a cada buitre de mente estéril.
Otro inocente detenido
No por delincuencia si no por ser diferente al resto,
Esto no se trata de que por delito están cautivos
Ya que hay más ratas a fuera pendientes de otros arrestos.


[Nuelky]
Palabra sorda; imagen ciega,
Ah! pobre del vínculo que de rencor nos riega
Si, la manada ya no ama a la pradera
Ya más nada se asemeja ni un poco a lo que antes era.
Trisiteza pasajera súbete a mi barca
Que en mi memoria aún queda sitio pa' otra marca.
Bríndame argumentos contra ésta vida terca
Teniendo que la parca nos pastorea de cerca.
Y tan cerca que siento su perfume en el tiempo,
Su añoranza desdibujándose en mi cuerpo,
Su triste estrategia hacia los hijos del silencio
Soñadora de un karma que nunca entenderá de precios.
Sólo el suplicio de su desprecio,
Sal de ésos vicios- le dije- socio no seas tan necio.
El reino es sucio pero eres recio
Vuelve al inicio, yo solo enuncio, no te sentencio.
Entonces notose perdido perdido allá en la ciénaga
Como poseído por un enjambre de luciérnagas.
Miradas clásicas que la miran de afuera
Imposible es de entender nada que el corazón no quiera.
Y ultimamente no queremos mucho,
Ya mi esencia y mi consciencia poco anhelan lo que escucho.
Si todo cambia entonces cámbiame el cartucho
Y recordame mis ideas pa' no olvidar porque lucho.