Nach - Leyenda

Si parezco más viejo es porque vengo de muy lejos, 
estuve corriendo entre mi ego y mis complejos, 
mi yo futuro vino a verme y me dio un consejo, dijo: 
“trabaja muy duro, luego déjalos perplejos.”
Hoy mi espejo sabe que estoy listo para otro disco, 
para otro viaje hacia mi luz y mis abismos, 
di un mordisco a la manzana del rap y desde entonces 
mi vida solo oscila entre euforias y cataclismos. 
Como equipaje traigo mis blocs, soy MC, 
también empecé en un garaje como Steve Jobs,
nuevos delirios que se derraman, nuevas letras que son lava, 
plasmando la gloria en la miseria humana. 
Ya pocos me ganan en este concurso, 
soy un genio sin más premios que el aplauso a mi discurso, 
constante pulso, entre quien me odia y quien me escucha, 
no tiro la toalla ni saliendo de la ducha. 
Dispuesto a luchar sin rechistar, 
artista sin nada que demostrar y mucho por conquistar, 
mi mente es transparente cristal, puedes ver dentro, 
pensamientos vuelven y hierven a fuego lento. 
Solo intento despertar temprano y ver en mis manos 
el regalo de existir, de vivir de lo que amo, 
hoy proclamo la muerte de mi temor, hoy me siento el mejor, 
hoy este micro crece como el martillo de Thor. 
Soy mi mentor y mi enemigo en uno, no creo en Dios 
creo en los incendios de un lápiz que arde y echa humo,
me bebo la vida en vaso de tubo, 
ya no existe el humor ni rencor oscuro que pueda dejarme mudo. 
Soy el tumor para carcas que me dan largas, 
para macarras que usan palabras macabras, 
dudo de rappers que hablan más de armas que de su alma, 
¡Y de esos que decían que no podría rapear más!
Es una cuestión de karma, es el Ying y el Yan, 
mi raps son gotas que rebotan en el tiempo de plan, 
primero observo y callo, escribo y detallo, aniquilo el fallo, 
luego en escenarios estallo como el Big Bang 
Y vibran mis cuerdas vocales, atraen a multitudes, 
mira mis rivales, caen en ataúdes. 
Temas inmortales no suenan en clubes, 
súbete a esta nube, verás el mundo brillar, jamás lo dudes. 
Solo pude gustar, ahora millones suben su pulgar, 
Me van a buscar a cada bolo para comulgar, 
Yo enseñé mis versos como quien enseña oro 
Y otros viajaron inmersos en paz olvidando el dolor 
Y si casi nunca aprendo ¿cómo quieres que te enseñe? 
Si ni siquiera duermo ¿cómo pretendéis que sueñe? 
Aunque algunos se empeñen en que pierda, 
Sé que mis fans me harán grande, 
mis haters me harán LEYENDA.