Santiuve - No puedo quejarme mas (con Daeron)

[Santiuve]
Si pudieras escuchar mi voz en off,
este quiero y no quiero,
cuánto me cegó ese velo,
qué poco sé yo,
y otro beso bajo el muérdago con mi alter-ego,
y tic tac… otra conversación con Dios sin feedback.
Si pudieras oír el eco de mis saltos al vacío,
si pudieras ver al crío que me dobla,
si el viento no sopla el bote zozobra,
dejaré pasar las horas y que el tiempo defina mi obra.
Si pudieras palpar mi pálpito,
mermar mi mar menor
de lágrimas de ácido,
mi ángel de la guarda toca el arpa,
yo las cuerdas de mi barba,
y nos paramos a pensar si hay mucho tráfico.
Es tácito mi yo parásito,
mi humor sarcástico,
mi amor tan clásico y tan puro,
no quiero un palco,
tengo un salto de canguro,
ya no me mojo,
soy un trozo de pan duro,
no conociste a un yo tan inseguro,
tan volcado en la causa del mal,
tan cap de suro,
no pude pagarte un castillo de Púbol,
pero ya no va a hacer falta, te lo juro porque a estas alturas…


[Estribillo] (x2)
No, no puedo quejarme más,
he de dejar que las fuerzas que están detrás
de mi capacidad actúen sin piedad,
hoy la distancia es tal que no puedo pensar.


[Santiuve]
Ay, si pudieras hacer algo por mí,
si supieras lo que valgo por fin, no mucho,
no escucho, y por eso nunca sé qué decir,
si leyeras mis pupilas de hollín, de chucho.
Si pulsaras estas teclas con mis dedos,
si te atrevieras a entonar mis miedos,
si supieras lo que yo sé, que no es nada,
si los celos no escupieran a la cara,
si pensar no supusiera nadar en claras de huevo;
mis alfiles hacen eses,
mis peones hacen huelga,
y mis torres son de Babel,
nadie da un duro sin intereses,
estoy muy verde,
y si maduro voy a caer.
cuento a miles mis sandeces,
mi debilidad me cuelga,
y me escondo bajo mi piel,
y nadie da un duro sin intereses,
estoy muy cerca,
y si me asomo voy a caer.


[Estribillo] 
No, no puedo quejarme más,
he de dejar que las fuerzas que están detrás
de mi capacidad actúen sin piedad,
hoy la distancia es tal que no puedo pensar.


[Daeron]
No puedo quejarme más, he de salir volando.
Y es que ahora no puedo pensar en otra cosa.

Mi cabeza fue un coto íntimo de caza,
mi corazón el músculo más torpe,
(¿Y tus ojos?) mis ojos un escaparate con escarcha,
mi boca el punto de fuga de mis intenciones,
todo lo que tuve es lo que me hizo falta,
la ilusión una cara bonita de póker,
el amor verdadero fue una amistad falsa,
mi mejor amigo se murió y era un pointer;
camino sin norte en filos de navaja,
y me fuerzo a continuar aunque me corte,
cada herida sangrante sin puertas es mi casa,
a lomos de un minutero al galope.


[Estribillo] 
(Y ahora sí que no) No, no puedo quejarme más,
he de dejar que las fuerzas que están detrás
de mi capacidad actúen sin piedad,
hoy la distancia es tal que no puedo pensar.


[Daeron]
No puedo quejarme más, he de salir volando.
Y es que ahora no puedo pensar en otra cosa.

Me intimidó mi timidez,
vendí mi don a una mujer,
me hice mayor no sé por qué.
No sé por qué, no sé por qué,
ah, no sé por qué, no sé por qué,
no , no sé por qué, no sé por qué,
ah, no sé por qué, no sé.