La cueva de los poetas proscritos
Crónica del concierto de Dj Rune, Trafik, JML, etc. en Madrid el 20 de Julio
Muchos de los grandes secretos de la humanidad han surgido en sitios oscuros y fríos. Muchas creencias e ideales, intentos revolucionarios y alternativas nunca antes expuestas, se han tramado en cuevas entre voces bajas y susurros que rasgaban un silencio, hasta entonces, siempre crudo. Durante siglos enteros, políticos, profetas, artistas y figuras de mil ámbitos y fines universales se han dado cita en estos lugares. Aquí, sus ideas han cobrado vida. Han encontrado alma infinita.
Lo cierto es que, aventurada en un fin de escribir cuanto veo y percibo, el pasado fin de semana, sábado tórrido en una tarde de verano, fui invitada a disfrutar al amparo de esa sombría sala, de esa tan singular “cueva urbana” en pleno centro de la capital hispana. Allí, entre altavoces, micrófonos y una tarima en alto, los que yo llamo “poetas proscritos” se encargarían de concebirnos a través de sus versos, un mundo nuevo para con una perspectiva diferente. De Madrid, Barcelona, Badalona y Sevilla, se reunieron estos y en el frío amparo de aquella estancia pequeña, íntima y familiar, dejaron bien claro con flow y buen ritmo, cuales eran sus pensamientos de cara a un mundo que todos conocemos.
Insane Dogs fueron los primeros. Con voz grave, hardcore arrasador, casi doliente, el cuarteto de MCs en compañía de Dj Rebe, se hicieron notar. Atrevidos, osados en temas como “Las Cosas Claras” o “Echando el Resto”, no dudaron en arrasar con todo cimiento social. Los allí reunidos, pocos pero entregados por completo, festejaban con aplausos y sonrisas la fuerza que se desprendía allá en lo alto, sobre el escenario. Fueron siete temas cargados de mensaje. Apenas hubo un momento de sosiego; y aún no dejado claro su fin, casi en pie de guerra lírica, Hannibal con JML se lanzaron juntos en todo un espectáculo de diez temas de buen ritmo y excelso flow. La energía que desprendían era contagiosa. Temas como “Dangerous”, “El grito de la calle” o “Quémalo” fueron auténticos detonantes de rap. La gente se animaba y las manos se alzaban a un ambiente extasiado por una atmósfera volcado en cada instante, en cada nota, en cada verso. Lejos quedaron dudas hasta ese instante de que el estandarte rap de Madrid había quedado bien alto.
Tras ello, desde la costa este, Badalona y Barcelona, el conjunto formado por Selop, J3L y DLO se lanzaron en picado a no ser menos que los que les habían precedido. No les fue fácil. Su casa, el arropo de su ciudad les quedaba lejos. Fue en este aspecto, sentido mi malestar al observar que muchos del público acudieron solo por ver y apoyar a su gente, no en pos de caminar con el rap, con todos los que allí se entregaban. Tanto así, que la sala se vació en buen sentido y creo considerar que solo los verdaderos seguidores de este estilo, nos quedamos allí, con Sélop y su grupo. A pesar de las circunstancias, los chicos de la costa este fueron valientes. Un memorándum a capella de “Cinema Paradiso” por parte de JML & J3L para entrar a continuación en acción con temas como “Ese es mi nombre”, “Líderes” o “Hoy no me puedo levantar”. Tal cual tornado que se haga preciar, el conjunto se lanzó sin miramientos, abarcando estilos tan variopintos como el rap más puro o derivados del rock-metal. Creatividad es su esencia más bella, más lucida, más potente. Ellos disfrutaron sobre el escenario; el público abajo, los seguía con ánimo y atento a todo cuanto decían; a todo cuanto clamaban.
La noche, la reunión de allí todos, hermanos defensores de un estilo, avanzaba, transcurría. Unos y otros, se conocían entre risas, conversación y fresca cerveza que se agradecía entre decenas de bocas sedientas. Fue para en esos instantes, cuando alrededor de las 22:45, el protagonista de aquella noche subió al escenario, siendo coronado por la intro que Dj Rune marcaba desde su mesa, siempre él serio, concentrado. Experto. Trafik fue aquel que impuso el gran sello para aquella noche junto con Sergio Antunez en los coros. Como un revolucionario habló acapella de “Livertad” (Crew Cuervos) o de “Algo que pensar” (El Club de los Tristes). Adoptó asimismo la faceta de maestro, con temas nuevos de su último trabajo “Con Acento” y con “La T”. Fue profeta y nos relató la faz actual de todos esos “Muñecos de Cuerda”. Encarnó en poco tiempo el alma de todos aquellos que no callaban frente a mil barreras, que enseñaban y que además, a pesar de las circunstancias, mantenía alta la mirada frente a un torrente de ideas, pensamientos y creencias. En definitiva, la ciega fe de un rapero “proscrito” en malos tiempos implantados a día de hoy. Trafik, junto Rune y Antunez, no defraudó; por contra, sorprendió. Causó admiración. Fascinación; pero Trafik aquella noche no desengaño. Se encumbró. Incluso llegado a más, quiso sorprender a los allí reunidos con una sutil sorpresa. Tal maestro de magia que se precie, dio la bienvenida a un especial visitante no esperado para ninguno: Jotandjota apareció de entre las tenues sombras del escenario. Con el rostro semioculto por su visera y la chanza que acompaña al MC, ambos se volcaron en un clásico, “Se acabó la fiesta” (El Club de los tristes), un tema que remarcó aquella “reunión de amantes del rap” hacía una noche apoteósica; de esas que, bien por bien, han de dejar buen sabor de boca.
Lo cierto es que no lo puedo negar. En aquel lugar, en aquella pequeña sala oscura y fría, dispar al calor que se percibía fuera, el tiempo pasó rápido pero no hubo instante que estuviera vacío o extinto de ideas, de sentimientos, de rebeldía, de promesas. Probablemente, allá fuera, en la calle, el mundo proseguiría con sus problemas, sus envidias, sus traiciones, su falta de dignidad; su falta de valores. La vida es así, siempre ha sido así, y solo en las cuevas, ajeno a un mundo que está viciado, se han expuesto aquellas ideas que han cambiado el mundo, que han creado nuevas esperanzas; nueva luz al final de un túnel oscuro. Esto es así, nadie lo va a cambiar, y durante siglos enteros así proseguirá. Yo he sido testigo de ello, y aquella noche de sábado, lo viví con plenitud; lo sentí con exactitud y ahora, con buen tino lo cuento para que vosotros, todos vosotros, seáis conocedores de ello, de todo lo vivido.
Señoras y Señores, bienvenidos a la cueva de los poetas proscritos.
Comentarios

Muy agradecido por la crónica, Capa. Ya sabes, mucho ánimo!
#2 el 30/07/2013 a las 16:43:
#1 Gracias HannibalBecquer. Es maravilloso el observar que hay (aún; pocas pero hay) personas humildes que, independientemente de que sean artistas o pertenecientes al público, valoran el trabajo de cuantos estamos aquí logrando sin beneficio alguno el que algunos sean conocidos y el que otros puedan disfrutar de los eventos aun no pudiendo acudir.