Review de "Entre andenes y salas de espera" de Morgan, Vito, Gordo del Funk y Acid Lemon

Dios los cría y ellos se juntan. Con ese célebre refrán o dicho popular más bien podríamos definir el soplo de aire fresco que ha supuesto la unión de las parejas formadas por Morgan y Gordo del Funk por un lado y por el otro Vito y Acid Lemon. Dos grupos que, dentro del género poético en el rap español son de lo más destacado a día de hoy, recordando los mejores tiempos de otros artistas como por ejemplo Rafael Lechowski. Nada que ver, pero siempre me evoca ese recuerdo cada vez que los escucho. Ya por separado lograron firmar dos de los mejores trabajos del 2016, con 'Sé qué se siente' por parte de Morgan y Gordo del Funk e 'Itinerarios' de Vito y Acid Lemon. El feedback estaba ahí, con colaboraciones constantes a lo largo de los últimos años, y desde luego 'Entre andenes y salas de espera' era algo que muchos llevábamos esperando ya un tiempo. Listos pues para ver qué nos depara este nuevo trabajo.

De este modo, el disco comienza con la homónima "Entre andenes y salas de espera", la cual fue además seleccionada como canción de adelanto. El tema sirve a la perfección para intuir por dónde se moverá el trabajo. Abre con una introducción larga hasta que la voz de Vito nos acompaña en este inicio de viaje, dando luego paso a un Morgan que se desliza por una instrumental prácticamente vacía mientras se unen los elementos al tiempo que la historia avanza. Una pieza rica en cuanto a elaboración musical por parte de Gordo del Funk y Acid Lemon. El amplio vocabulario de Vito queda de sobra demostrado en "Humo de amapolas", un corte cercano a lo que vimos en 'Itinerarios'. Figuras retóricas como la aliteración se dan cita aquí para hacer las delicias del oyente. Digna de admirar también es la capacidad para estirar la rima de Morgan.

En un trabajo con un buen número de colaboraciones vocales, el alicantino Santiuve supone la primera de ellas. El tema lo vuelve a abrir Vito con un párrafo que se hace corto y que da paso a un estribillo potente a tres voces. Morgan se muestra directo en su discurso con buenos recursos. Es entonces cuando antes del segundo estribillo y la aparición de Santiuve, Vito y Morgan construyen un puente en el que sus voces se escuchan lejanas. Santiuve no se queda atrás en este "Canciones que no hablan de ti" y como no podía ser de otra forma mantiene un nivel que no desentona en absoluto con los anfitriones. Siempre se sale en las colaboraciones. El puente y estribillo se repiten al final y el tema se despide con un fade out enlazando con "Vigilias y duermevelas", con otra introducción consistente en la que poco a poco se suman instrumentos. Por primera vez en el disco es Morgan el encargado de abrir la canción, y lo hace a pleno rendimiento. Una canción suave pero que alberga una crudeza intimidante en su interior, una letra trabajada como suele ser costumbre.

"Intergaláctico" le da el protagonismo inicial a Vito, que nos habla desde la distancia. Decir que los ritmos de Acid Lemon y Gordo del Funk se mueven en una sintonía que demuestra un nivel de organismo considerable, con unas instrumentales que van añadiendo elementos conforme avanzan. No se limitan a un simple sample con un loop de batería que se repite sin cesar. El párrafo de Morgan es sencillamente una barbaridad, lo tiene todo; con un flow y una letra potente donde todos los conceptos encajan a la perfección. No podían faltar en un disco de estos cuatro MCs como Ríe y Rams, que hacen su aparición en "Fabricar ilusión". Hemos estado acostumbrados a ver colaboraciones entre ellos en los últimos años, y algo así tenía que caer. La verdad es que se nota muy bien la compenetración que tienen entre sí y el tema desprende muy buenas vibraciones por parte de cuatro amigos que se juntan para escribir textos complejos. Le dan un toque diferente, con la solemnidad de Ríe y el buen rollo de Rams.

El primer adelanto lo tuvimos en forma de "Leviatán", con la colaboración de Microbio de Lágrimas de Sangre, un grupo que está dando mucho que hablar en los últimos años. Considero que rapean aquí más crudo de lo normal, especialmente Morgan que va ganando fuerza conforme avanza su rapeo. A Microbio lo veo mejor en el estribillo que en su estrofa. Me parece que es una buena letra pero en la ejecución queda por detrás de Vito y Morgan. El estribillo suena potente, con ese tono de voz rasgado y crujiente. "Camino a cualquier parte" opta por la fórmula del hook scratcheado. De este tema no puedo decir nada malo. Prácticamente no le encuentro fallo a este disco, y a esta pista en concreto aún menos, pues me parece una obra de arte en toda regla. Simplemente es una pieza que hace flotar al oyente con una atmósfera envolvente en la que las voces de Vito y Morgan se mueven como peces en el agua. Un oso polar comiendo un caramelo de menta es bastante fresco, pero bastante menos que Vito, Morgan, Acid Lemon y Gordo del Funk.

La última colaboración del disco llega de la mano de, como no podía ser de otra manera, el zaragozano Sharif, al cual hemos visto colaborar en numerosas ocasiones tanto con Morgan como con Vito. En "Llueves", Morgan demuestra poder hacer uso también de complejas figuras retóricas, jugando a placer con las mismas. Un hook sampleado sirve como puente entre los escritores. Del párrafo de Vito puedo destacar las estructuras que realiza, muy comunes en su escritura pero creo que es la primera vez que las menciono en la reseña y este era el momento preciso para ello. El tema lo cierra el invitado, con ese estilo única que tanto le ha caracterizado a lo largo de su carrera. Cumple, como es lógico, con lo que se pide de él. Finalmente, y para despedirnos tenemos "A près du soleil", en la que solo queda rendirse a estos músicos con mayúsculas.

Morgan, Vito, Gordo del Funk y Acid Lemon han conseguido plasmar una placa de gran nivel. Se podía intuir a juzgar por los nombres que se juntan y el momento que viven en términos de trayectoria, pues están ahora mismo en su prime compositivo, pero había que demostrarlo y 'Entre andenes y salas de espera' es precisamente eso, una demostración de lo que estos cuatro chicos son capaces de hacer desde el underground más poético y visceral. Personalmente, creo que es una obra completa a la que ni le sobra ni le falta nada. Muchos podrán achacar que diez canciones son pocas, y yo he de respetar su opinión, pero como esto va de opiniones, debo decir que prefiero un disco de 9-12 canciones en las que todas tengan un nivel alto antes que álbumes sobrepasando los 15 cortes donde haya interludios y canciones que sirvan solo para rellenar. Pero cuidado, que también hay discos de 15 canciones sublimes. No les puedo pedir más, pues han conseguido provocar en mí lo que esperaba de ellos. Mi sincera enhorabuena para los cuatro.

Texto por: Rubén Jimenez Lorca