KeyZi
Nací un día soleado cerca de primavera en 1999. Cuando pequeña me gustaba recoger higos de mi patio. Esos higos más tarde se pudrieron al igual que el cuerpo de mi madre consumido por un cáncer. Me fui a vivir en la casa de mi abuela con mi tía, mi hermano, y mi padre a los cinco años.
Siempre me gustó escribir, si no escribía, pensaba versos en mi mente, pensaba coros, los cantaba. Cada cosa que veía lo hacía mío, al darle un significado a través de la belleza de las palabras. De cuando era pequeña recuerdo poemas como 'El pepino', 'Mi mami', 'No me gustan los perritos ñatos', 'No hay más pan', entre otros.
Hasta que años más tarde conocí el rap a los 9, su eterna arcana magia no podía dejar de admirar, ¡no era más que poesía acoplada en una pista musical!, así que pase de escribir en una mesa, a hacerlo con una base, audífonos y un leve movimiento de cabeza.